Productos de proximidad. Una apuesta por el ecosistema
Los productos de proximidad tiene como objetivo reducir los pasos que hay desde el productor al consumidor, convirtiéndose en una alternativa al suministro de las grandes superficies.
En la actualidad consumir productos de proximidad es uno de los alicientes que tenemos los consumidores para apostar por el ecosistema. Debemos pensar que pequeños gestos como la cercanía puedan tener una repercusión en las personas, la economía, el medio ambiente y la salud.
¿A qué llamamos productos de proximidad?
Los productos de proximidad hacen referencia a aquellos alimentos que se consumen a poca distancia de donde se produjeron. Parece que lo único que cambia es el gasto económico y medioambiental que provoca el transporte. Pero existen otras cuestiones que se ven perjudicadas cuando no compramos este tipo de productos como pueden ser la salud, el sabor de los productos, la economía local… Todos ellos se ven deteriorados cuando empiezan a introducirse intermediarios en un mercado cada vez más globalizado.
Proteger y fomentar el consumo de productos locales no solo repercute en los productores, también los consumidores se ven beneficiados ya que se fomenta la economía local, además del fuerte componente de la sostenibilidad y la ecología. Lo ideal es que cuantas más cortas sean las cadenas de la producción menos efectos negativos dejará para todos.
Razones por las que consumir productos de cercanía
1.Disfrutar de productos más frescos y sabores estacionales
Los productos de proximidad son más frescos y sabrosos ya que mantienen intactas sus propiedades en el momento de su recolección, además contienen un mayor aporte nutricional.
Además los productos son estacionales por los que son productos de temporada, ni cultivados al otro lado del planeta. El consumo local te permite descubrir sabores de la tierra y descubrir que productos se consume en cada mes del año.
2.Mayor seguridad alimentaria 1.Disfrutar de productos más frescos y sabores estacionales
Los consumidores cada vez estamos más concienciados de los alimentos que consumimos . Saber sobre el origen de los alimentos hace que le aportemos muchos más valor tanto en lo económico como valor nutricional.
3. Evitar el consumo a gran escala
Debemos evitar el consumo incentivado en una producción barata, cargada de pesticidas y una distribución a gran escala que hace que la alimentación esté globalizada perjudicando mayoritariamente a los productores.
4. Favorecer la economía local
El gran consumo está a manos de las grandes empresas no siendo justos en los precios en muchas ocasiones. Por este motivo es una buena razón favorecer el consumo de productos de cercanía ya que colaboramos a crear una economía local justa y de futuro que beneficia a todo mundo.
5. Protección de salud y mantenimiento de las tradiciones.
La producción en masa está asociada a los monocultivos, pesticidas, fertilizantes…productos que pueden ser peligrosos para nuestra salud. Sin embargo los productos de proximidad suelen ser ecológicos y se basa más en la confianza entre productor y consumidor.
Además, se favorece a las pequeñas explotaciones familiares, agrarias y ganaderas de la zona que siempre proporcionan un valor añadido al producto, la cercanía y la producción tradicional.